sábado, 16 de mayo de 2009

Recuerdos de una pelea otoñal con "E"



"E" me dice… “Aún la quieres a ella… y si no es a ella entonces a las otras de las que tantas veces me has hablado y que has escrito en innumerables oportunidades…” Mientras ella me recrimina todo esto mirándome a los ojos con una cólera que hace mucho tiempo no veía, pienso que soy un idiota, siempre mi sinceridad y las cosas que escribo me juegan una mala pasada y ahora ella está tan furiosa que necesitaba abrazarla para que ya no me mire de esa manera… "Pero E…" “Nada de eso andrés, simplemente siento que en cada rincón de estas calles ya has estado con alguien mas, que si nos pasa algo ya lo viviste con otra, entonces pienso que soy una repetición de tu pasado, seguro que en algunos momentos me comparas con las demás…” Yo pienso que "E" en parte tiene razón, pero por otra parte se equivoca mucho, yo jamás la he comparado con nadie, jamás podría describir sus ojos decorados por las mas lindas pestañas que existen, con los ojos de otra mujer, jamás esa ternura inquietante ha podido ser desbordada por otra ternura, aunque por otro lado tiene razón, he sido demasiado desatinado al hablar sobre mi vida, de esas cosas de las que ya no debo mencionar…

En ese instante voy recordando muchos detalles, como por ejemplo la primera vez que conocí a "E" y mientras mas lo pienso voy dándome cuenta que de eso no ha sido hace mucho tiempo, no han pasado ni dos meses de conocernos y ya en todo ese tiempo hemos vivido situaciones que ningún par de amigos han pasado… Sí… y si digo “amigos” es porque "E" y yo somos amigos o por lo menos es eso lo que nos decimos todos los días cuando nos vamos caminando abrazados diciéndonos al oído lo mucho que nos queremos….

Mientras seguimos en esa cuadra de Miraflores mirándonos fijamente, yo tomo la ofensiva y le pregunto que por qué tanto le molesta eso? Acaso he hecho algo malo, acaso tiene derecho de molestarse y mientras más sigo hablando sus ojos y sus mejillas que se van sonrojando cada vez más, me demuestran que ella está llegando al límite de su furia, pero aun así prosigo… Acaso no puedes decirlo…? (mientras digo todo esto, con mis dedos imito su labios para que los mueva y diga algo) acaso eres tan cobarde que no me puedes decir por qué te molesta… “Simplemente me molesta y punto, así que si algún día…” Entonces ella se calla y yo le exijo que termine de hablar… “Si algún día estas con otra chica, una amiga…jamás le hables de mí ya que le harás daño, no quiero que me menciones y mucho menos quiero que escribas algo sobre nosotros, nunca mas…” Cuando termina de hablar yo necesito y quiero abrazarla pero ella me rechaza con molestia, mientras andamos en esa lucha de cariño, se acerca una señora muy mayor y le dice a "E" que si realmente está enamorada primero se tiene que querer a si misma y tiene que comenzar mandándome al demonio porque era un cretino que no la valoraba, que no era capaz de escucharla y de pedirle perdón… En ese momento yo quería mandar a la mierda a esa vieja metiche porque no sabia de lo que hablaba, pero "E" no decía nada y solo la miraba hasta que yo le dije que nos dejara en paz y que no se metiera en lo que no le incumbía, así que la vieja se fue dando comentarios hasta que desapareció de nuestra vista…

Luego de esa estupida escena, le tomo el rostro a "E" y le digo que la quiero mucho, que me es importante y necesaria, pero "E" no quiere escucharme, insiste que soy un tonto, que nunca le demuestro que la quiero, que cuando se acerca alguien que nos conoce yo la suelto si estamos abrazados o simplemente me alejo, que definitivamente no la quiero y me dice tantas otras cosas que poco a poco me van haciendo sentir que la estoy perdiendo…

Y yo no la quiero perder… y eso lo voy sintiendo con cada segundo que pasa, la necesito mucho, necesito estar con "E" todos los días, escuchar cómo estuvo su mañana, cómo se pelea con sus hermanos, que me cuente alguna historia de su infancia y que me adorne el cielo gris de Lima con sus ojos. Creo que hasta ese momento no me había dado cuenta como esa muchachita linda se ha vuelto necesaria en mi vida, porque si ella no estuviera aquí simplemente yo estaría rondando por pasados y besando uno que otro labio que no necesito en este instante, porque todo en mi vida en este ultimo tiempo se ha ido volviendo en una repetición asquerosa de brazos y cabellos que por un instante me divirtieron pero que ya no necesito, entonces mientras voy pensando todo esto me voy sintiendo muy vulnerable y eso me molesta, quiero que "E" se vaya o en el fondo el que se tiene que ir soy yo, pero la miro y simplemente esa ternura me hace desistir de cualquier idea de fuga y mas bien hace que haga a lado mi orgullo y le pida insistentemente que por favor se quede un rato mas para resolver todo esto… “No quiero, además ya es tarde y mis padres se molestaran si me demoro” Yo le insito por enésima vez que se quede o por lo menos que me deje acompañarla como siempre al paradero… “No andrés, no puedo caminar en estos momentos contigo, estoy muy molesta, creo que no solucionaremos nada hoy” Por ultima vez le insito y le digo que le estoy demostrando lo mucho que la quiero ya que he bajado mi orgullo muchísimo y que si se va simplemente terminará de quebrar algo que se está volviendo muy frágil… "E" me mira y me dice… “Adiós andrés” y me deja ahí parado percibiendo el olor a garúa que está a punto de caer.

De camino a mi casa solo, pienso que en el fondo "E" y yo somos tan distintos y es por eso que nos queremos tanto pero a la vez es eso nuestra ruina, ella no podría soportar mi libertad y mi pasado y yo no podría soportar su tranquilidad y su entorno… Es por eso que nunca nos diremos esas palabras que quizás queremos decirnos hace mucho y eso es una gran pena, aunque en mi caso no me sorprende, porque siempre hay algo que me malogra el pequeño instante cuando aparece alguien así de importante…

Es de madrugada y no puedo terminar un trabajo que tengo en la computadora, simplemente "E" está en mi mente y ese sentimiento de perdida se agranda cada vez mas, así que salgo a la calle y la llamo al celular, timbra y timbra y ella no me contesta… así que le dejo un mensaje de voz diciéndole que si esa no es la muestra de lo mucho que la quiero entonces no sé qué más quiere de mí, le pido que por favor no vaya a sus clases en la mañana y que yo faltaría a mi trabajo y que así tendríamos tiempo para solucionar todo lo que nos está separando, que por favor me mande un mensaje y me confirme si lo hará…

El mensaje esperado nunca llegó a mi celular y a la vez en ese momento mi orgullo se iba remendando en mi mente, consiguiendo tomar la decisión que nunca mas me acercaría donde ella o por lo menos ya no le insistiría en nada… aunque en el fondo "E" y yo todavía tenemos mucho tiempo y cariño de sobra para hacernos aun mas daño…